viernes, 15 de mayo de 2009

Cata de Sauvignon Blanc Chilenos

Esta vez un pequeño grupo de Sommelier, Vino & Restauración se reunió para realizar una cata de algunos representantes de los vinos Sauvignon Blanc oriundos de Chile. Ya que están dando de que hablar en algunas revistas especializadas.



Canepa Finisimo, Sauvignon Blanc, Valle de Casablanca, Chile, 2008
Esta Bodega fue fundada en 1930 por un inmigrante de origen italiano llamado Jose Canepa, La historia de esta esta ligada a la de la viticultura chilena.
El Valle de Casablanca esta ubicado al norte del Valle Central muy cercano al océano pacifico, esta característica geográfica hace que los vides blancas den muy buenos resultados en esta localidad, ya que las nieblas marítimas sirven de filtro solar a los viñedos mientras la fresca brisa del océano regula la temperatura, conservando así la preciada acidez de esta cepa y retardando el proceso de maduración.
Después de terminar la fermentación pasa 5 meses en tanques de acero inoxidable antes de ser embotellado.
Este blanco se destaca en copa por sus tonos amarillos pálidos con intensos reflejos verdosos, es muy brillante. Los aromas de frutas cítricas y de manzana verde se distinguen acompañados por un fondo de notas herbáceas. Una correcta acidez marcada en el paladar sin ser muy agresiva, al abrirse nos regala delicados toques de pasto fresco en nariz. Persistencia media alta. Como final presenta leves recuerdos minerales.
Para acompañar se puede elegir Ensaladas de Mariscos, Carpaccio o Tartar de Salmón, siendo también una excelente opción como aperitivo.



Morandé Reserva, Sauvignon Blanc, Valle de Casablanca, Chile, 2007
Viña Morandé fue fundada en 1996, es una bodega familiar y Pablo y su hija realizan el trabajo enológico, y fue el pionera en la viticultura en el Valle de San Antonio, nueva zona Chilena productora de los blancos más interesantes del país.
Este Sauvignon es plantado en el Valle de Casablanca, gozando de las mismas ventajas climatológicas del blanco anterior.
Los reflejos verdes brillan en el interior de la copa que presenta un vino amarillo paja, los aromas son muy frescos, notas de pasto y recuerdos de lima se presentan sin mucha intensidad, desvaneciendose rápidamente. Mejora en el paladar con una expresión de frutos cítricos mas profunda, de marcada acidez en boca nos ofrece ricos recuerdos de toronja rosada.
Una fresca ensalada de camarones, berros, tomates cherry, manzanas y vinagreta de miel y frutos cítricos y salpicada de trozos de almendras crujientes; haría muy buen complemento a este vino.


















Viña Los Vascos, Sauvignon Blanc, Casablanca/Curicó, Chile, 2007
Esta viña propiedad del prestigioso grupo Lafite de Burdeos elabora en su bodega de Colchagua estos vinos con filosofía francesa, cabe recordar que el Sauvignon Blanc es la cepa que se usa para elaborar muchos de los grandes blancos de Burdeos, lo que nos hace pensar que estos productores son especialistas en el manejo de esta uva francesa. Las uvas son originarias de Casablanca y Curicó, que se distingue de la primera por ser más cálida y estar localizada más cerca de la Cordillera de los Andes.
El amarillo pálido brillante sigue distinguiendo a los vinos de esta cepa. Muy expresivo en nariz nos ofrece aromas de miel, flores blancas y delicados recuerdos de ruda, es femenino y elegante conservando su frescura de vino joven. La entrada en el paladar es suave y fresca de acidez muy equilibrada. Poco persistente. Este vino durante años ha sido en nuestro mercado una opción que no deja mal a nadie.
Para comer con Sashimi o Calamares rebosados con finas hierbas.
86 ptos Wine Spectator



Ventisquero Reserva, Queulat, Sauvignon Blanc, Valle de Casablanca, 2005
Esta viña se fundo en 1998, distinguiendose por tener un equipo joven y emprendedor, con una Bodega ubicada en el Valle de Maipo. Ha entrado en Venezuela con fuerza en los últimos tiempos y se ha ganado el aprecio de muchos consumidores de vinos en Venezuela.
La cosecha de estas uvas blancas se realizo a mano a tempranas horas de la mañana para para evitar el excesivo calor del día, conservando así una temperatura estable hasta su llegada a la bodega. Antes de la fermentación se realiza una maceración en frío de 14 horas para extraer, aromas, al terminar la conversión del mosto en vino se cría sobre sus lías durante 3 meses aportando así un complejidad aromática que se ve reflejada en la cata.
El color nos habla del tiempo que ha pasado en botella, pues exhibe un tono dorado muy bello con matice verdes, se puede apreciar densidad al agitar la copa. En nariz ofrece una paleta aromática compleja e interesante, conserva su frescura de hierbas fundida con aromas de albaricoque, miel y pan tostado. En boca su entrada grasa y densa, estalla con recuerdos de piña deshidratada y frutos secos. La guarda en botella lo ha convertido en un vino complejo y diferente. Importante: debe tomarse ahora.
Para acompañar un Pollo al curry con leche de coco o a la mostaza seria genial.

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